A veces, los problemas digestivos por los que pasa la mayoría de personas en la vida moderna se deben a una mala alimentación, aunque en otros muchos casos pueden ser otras causas más complejas. Por esta razón hoy hablaremos de cómo mejorar tu digestión a través de la alimentación de manera práctica, sana y natural.
Si la hinchazón, los gases y los problemas para ir de manera frecuente al baño son tu caso, presta atención a estos 7 consejos clave de cómo mejorar la digestión:
Cuida la ingesta de fibra en la comida
Cuidar la ingesta de la fibra en tu dieta es importante para prevenir afecciones estomacales, evitar el estreñimiento y para tener una mejor digestión. Además regula los niveles de colesterol LDL y reduce el riesgo de cáncer de colon.
La fibra se obtiene de productos de origen vegetal como las legumbres, verduras, frutas, nueces, semillas y productos integrales (pan, pasta, arroces). Si no estás acostumbrado a consumir mucha fibra en tu dieta, es importante que la incluyas de manera paulatina para que tu estómago se adapte poco a poco.
Existen algunos casos en donde el consumo excesivo de fibra en la dieta puede resultar en mala digestión y muchos gases, en este sentido la clave es el balance.
Masticar mucho mejor la comida
Si quieres lograr algo como mejorar la digestión, debes de saber que la saliva contiene enzimas digestivas que ayudan al estómago a descomponer y procesar los alimentos.
La clave es masticar bien los alimentos para que estos se mezclen de manera eficiente con la saliva. Además, masticar bien los alimentos ayuda a que lleguen al estómago mucho más triturados y en trozos más pequeños, lo que hace el proceso de digestión más sencillo para el cuerpo.
La calidad de digestión de los pacientes mejora enormemente cuando implementan mejores hábitos de masticado.
Parte de esto tiene que ver con tomarse el tiempo para comer y evitar hacerlo con prisas. Algo que es muy complicado hoy en día con el ritmo de vida que llevamos.
Introduce probióticos naturales
Comer productos fermentados derivados del lácteo puede ser una herramienta muy útil para mejorar la salud digestiva, ya que estos contienen una alta cantidad de bacterias beneficiosas, también conocidas como probióticos, que ayudan a regular los procesos digestivos, reduciendo los cuadros de irritación, la hinchazón y la pesadez.
Los probióticos tienen otras funciones, además de equilibrar la microbiota, como fortalecer el sistema inmunitario y mejorar la absorción de nutrientes.
Algunos fermentos recomendados en esta categoría son el yogur, el kéfir, los fermentos de la soja (tempeh y miso). También se encuentran probióticos en otros alimentos como la kombucha y el chucrut.
Dividir las comidas en porciones más pequeñas y alimentos cocinados
Dividir las comidas diarias en varias porciones más pequeñas puede ayudar a que el estómago haga mejor la digestión, evitando la pesadez, el dolor abdominal y otros problemas asociados. Especialmente si sufres de este tipo de problemillas.
No se trata de consumir menos de los requerimientos diarios mínimos, sino de distribuirlos en 5 o 6 comidas.
También se recomienda si sufres de malas digestiones priorizar el consumo de verduras cocinadas en lugar de crudas, ya que facilita la digestión. Al igual que los alimentos más bajos en grasas como carnes y pescados magros.
Beber suficiente agua
Puede que la mayoría de las personas escuchen con mucha frecuencia que es necesario consumir suficiente agua para mantenerse saludables y es verdad.
Consumir suficiente agua ayuda a que las mucosas intestinales permanezcan sanas por tiempo prolongado, ayuda a prevenir el estreñimiento y participa en la descomposición de los nutrientes. Nuestro cuerpo es más de un 60% agua y para funcionar correctamente necesita que estemos hidratados.
En personas que sufren digestiones pesadas, es conveniente que separen la ingesta de agua de las comidas porque esto puede terminar restándole potencia a los jugos gástricos, especialmente en personas más mayores.
Alimentos que promuevan las enzimas digestivas
Buscar qué comer con mala digestión puede llegar a ser una verdadera odisea.
Una forma de promover la digestión de manera sana y natural es incluyendo en tu dieta alimentos que activen a las enzimas digestivas.
Existe un amplio abanico de alimentos que ayudan a la digestión por enzimas como, por ejemplo: kiwi, piña, papaya, aguacate, mangos, pepinos, fermentados, yogur, jengibre, miso, brócoli, espinacas, germinados tiernos y zumo de limón.
Infusiones
Cuando se trata de cómo hacer bien la digestión, pocas estrategias alternativas aportan tan buenos resultados como las infusiones.
Lo mejor de ellas es que son aromáticas, relajantes, llenas de antioxidantes, muy sabrosas y dependiendo de la variedad de hierbas, hojas o frutos que las compongan aportan un sinfín de beneficios a la salud, con un consumo moderado.
Algunos buenos ejemplos de infusiones que pueden ayudar a la digestión son: té verde, té de jengibre, té de menta, el hinojo, la manzanilla, tomillo y el té de cúrcuma.
Hasta aquí los consejos prácticos, naturales y sanos de cómo mejorar la digestión a través de la alimentación. Si sientes que los trucos sencillos no te están ayudando en absoluto, es necesario que acudas a un nutricionista especializado en patologías digestivas o a un médico digestivo para evaluar posibles patologías que puedan estar provocando los malestares.
En nuestro caso, como nutricionistas, contamos con dicha especialización. Así que no dudes en ponerte en contacto a través del formulario, email o whatsapp.