

En un mundo tan acelerado, estresante y sin apenas tiempo libre, es normal que la mayoría de las personas nos perdamos en un mar de los estímulos de comida que nos rodean, sin tener en cuenta nuestras sensaciones de hambre o saciedad.
La única forma de tomar consciencia de nuestros hábitos alimentarios es mediante la educación nutricional, una poderosa herramienta que nos ayuda a tomar decisiones informadas sobre lo que consumimos y cómo afecta a nuestra salud.
En este artículo se explorará qué es realmente la educación nutricional, romperemos algunos mitos y descubriremos por qué es tan importante.
Definiendo la educación nutricional
La educación nutricional es el conjunto de estrategias y procesos educativos que permiten a las personas comprender los principios básicos de la nutrición, de una forma sencilla, con la finalidad de que aprendamos a tomar decisiones informadas sobre los alimentos, su selección, preparación y consumo de manera adecuada para tener una vida más saludable.
Por tanto, nada tiene que ver con dietas y fórmulas restrictivas. Se busca incentivar en las personas a crear hábitos alimenticios constructivos.
La educación nutricional, ayuda a que las personas entiendan qué es lo que comemos realmente y el impacto de esto en sus vidas, estado mental, emociones, cuerpo y bienestar a largo plazo.
Para llevarse a cabo, se utilizan estrategias dinámicas de aprendizaje, adopción y difusión de la alimentación nutritiva balanceada.
Características de la educación nutricional
Para contextualizar esta rama del conocimiento alimenticio y separarla de otras corrientes poco formales o new age que intenta promover prácticas genéricas, o dietas que perjudican la salud, aquí se puntualizan algunas de las características de la verdadera educación nutricional:
- Se basa en la evidencia científica y en datos reales sobre la comida y sus efectos en nuestra salud y organismo
- Promueve la autonomía y la toma de decisiones por parte del individuo
- Busca que las personas entiendan la nutrición desde múltiples contextos, adaptándose a todo el mundo de forma individualizada
- Es práctica
- Tiene un enfoque preventivo
- Promueve el estilo de vida saludable
- Fomenta el aprendizaje progresivo y continuo sin ser abrumador, obsesivo ni culpabilizante
- Tiene un enfoque holístico que considera el factor emocional, social y personal, al igual que el físico
- Promueve cambios en el comportamiento y en los hábitos de las personas
- Se enfoca en recalcar la importancia, a veces sutil a corto plazo, pero vital a largo plazo, de la alimentación
Mitos sobre la educación nutricional: Lo que no es
Existe mucha desinformación sobre lo que es la educación nutricional, la cual va tomando forma de mitos que calan en la población general, haciendo que muchas personas asocien erróneamente la educación nutricional a las dietas restrictivas o a perder peso. Aquí hay algunos ejemplos de mitos y creencias falsas sobre este proceso educativo:
Mito 1: Hay que contar calorías
Pese a lo que se cree, contar obsesivamente las calorías de los alimentos no es nada saludable, ni de buena educación nutricional. Si bien es común que en el mundo del fitness se utilice esta práctica con objetivos puramente estéticos, esto no debe aplicarse a la población general porque no es sostenible,, ya que hay otros factores más importantes como la calidad de los alimentos, composición nutricional, poder saciante, entre otros. Saber comer no debe ser obsesivo, es liberador.
Mito 2: Las grasas son malas
A través de la educación nutricional se desmonta el mito de que no se puede comer grasas y de que todas hacen daño al organismo. Las grasas son un componente fundamental y necesario en la alimentación y existen buenas y malas. Lo importante está en saber elegir las fuentes sanas y reducir el consumo de las poco saludables.
Mito 3: Comer sano es hacer dieta
Otro mito que se puede desmontar desde la perspectiva de la educación nutricional. Las dietas no nos permiten aprender a comer saludablemente, ya que se basan en seguir un papel con multitud de restricciones, y no son sostenibles a largo plazo, al contrario, perjudiciales. La educación nutricional crea una alimentación saludable desde el cambio de hábitos de forma consciente e individualizada, que además de ser nutritiva para el cuerpo lo es para la mente, donde no hay lugar para las restricciones o alimentos prohibidos.
¿Por qué es tan importante la educación nutricional?
La nutrición está demasiado relacionada con las dietas y la pérdida de peso. Lo que conduce a la asociación de que comer saludable y nutritivo significa privarse o prohibirse el consumo de otros alimentos menos nutritivos. Además el exceso de información actual a través de los medios y redes sociales sobre temas de nutrición y alimentación es abrumador y realmente muy confuso para la población. Por ello, una educación nutricional adecuada es clave para entender y llevar una alimentación saludable y sin culpa. Otros beneficios que resaltan la importancia de este proceso educativo:
Salud y bienestar
Una buena alimentación reduce el riesgo de desarrollar algunas enfermedades o patologías, muchas de ellas de alta prevalencia hoy en día y con alto índice de morbi-mortalidad, como los problemas circulatorios y cardiacos. Una educación nutricional adecuada a estas patologías es clave para garantizar una mejor calidad de vida e incluso ayudar a revertirlas.
Mejora tu salud mental
Recientemente se ha descubierto, mediante estudios en el campo de la neurociencia y la psicología, que existe un impacto de los alimentos en la salud mental, especialmente en trastornos depresivos, de ansiedad e insomnio. Además influye en los mejora los niveles de energía física y mental, concentración, cognición y memoria.
Creación de hábitos saludables
La salud nutricional se enfoca en cultivar hábitos saludables a largo plazo y concede herramientas de gestión y toma de decisiones esenciales para formar patrones alimentarios constructivos y sostenibles. Siendo especialmente relevante en niños y adolescentes, creando las bases de una alimentación saludable y por tanto una mejor calidad de vida y salud en el futuro.
Toma de decisiones flexible e informada
La salud nutricional permite que las personas tomen decisiones adaptadas a las condiciones o desafíos que tengan delante en ese momento. Algo que no se puede conseguir haciendo dietas genéricas, ni copiando las conductas de otras personas ciegamente. Cada persona y contexto social es única y de ahí la importancia que cada uno puedan tomar sus propias decisiones informadas.
Independencia nutricional (adiós a los mitos y modas)
La educación nutricional es importante porque ayuda a que las personas sean libres de dietas y personajes de moda, para en su lugar empoderarse en su propia alimentación y estilo de vida. Al ser dueños de sus decisiones y conocer los procesos nutricionales, son capaces de elegir y conducir su alimentación, sin dejarse llevar por mitos y engaños.
¿Cómo aplicar y difundir la educación nutricional?
Hay muchos canales por los cuales se puede difundir la educación nutricional. Considerando las características de la vida moderna, es ideal hacer contenidos webs interesantes y formatos que se adapten las principales redes sociales para impactar y conciencias a la población más joven.
Los programas escolares también son un eje central de difusión, sobre todo por el impacto que tiene la alimentación en la salud, y el alto consumo de alimentos azucarados en la población infantil y adolescente. La educación nutricional debería estar presente en los programas escolares y ayudar a la toma de consciencia de una alimentación saludable a los estudiantes mediantes talleres y charlas dinámicas, prácticas y atractivas.
Y por supuesto políticas sociales, que permitan abaratar productos de mayor calidad nutricional frente a otros alimentos menos interesantes, al igual que otras políticas relacionadas con la publicidad, campañas formativas en pro de unos hábitos de alimentación saludable y la figura de un nutricionista en el sistema de sanidad pública, que ha dia de hoy no existe.
Ahora, ya sabes qué es la educación nutricional y por qué es tan importante para la salud de las personas, pero, ya a que este es un proceso de aprendizaje continuo en busca de construir hábitos saludables y transformadores, te invitamos a seguir evaluando más contenidos y resolviendo tu dudas con nosotros.